LA HUMANIDAD: UNA ESPECIE CON OBSOLESCENCIA PROGRAMADA
Desde las calzadas y los canales romanos, la Humanidad no ha creado nada laico cuya vocación fuera la de durar para siempre ; ni siquiera la Gran Muralla china, pues, aparte de su majestuosidad, su función de fortaleza terminó cuando acabó la amenaza de los guerreros mogoles. Cada vez que hemos intentado tener una perspectiva milenaria de nuestra existencia, ha llegado una oposición imparable que "suavemente" la ha reconvertido en promesas del Más Allá. Ya no pensamos en la eternidad de nuestra Especie, si no en la del Individuo; eso sí, después de la muerte. !Vaya timo! Han habido intentos de crear ideologías milenarias, ninguno acertado, y todos malogrados al enfangarse en el instinto egoísta del nacionalismo y el racismo; curiosamente diseñados siempre en torno a la misma fuente espiritual. Hoy, la perspectiva vital de moda para los humanos se circunscribe entre trabajar como un burro para conseguir una larga jubilación (sometida ahora a una campaña de inviabilidad ...