Este precioso Planeta azul no sería el mismo sin los HONGOS. Hace millones de años que están aquí, pero no fueron los primeros en llegar, y es cierto que con ellos CAMBIÓ TODO. Estoy convencido de que PARA MAL. Cuando abandonamos el mar, los muy puñeteros, como garrapatas microscópicas, llevaban millones de años esperándonos agazapados en tierra. Conociéndolos, pienso que la convivencia no fue buena, incluso puede que estuvieran detrás de algunas extinciones. Ellos conocían bien su medio terrestre; nosotros, aventurados fuera del agua, éramos los primeros exploradores. Nos hicieron picadillo varias veces, pero siempre quedamos alguno, poco amigo de la humedad, que se les escapaba. Luego llegó una simbiosis que mejoró mucho las cosas, relegándoles a la tarea más desagradable de la Vida: la descomposición de la materia muerta. ¿GRATIS? Estoy convencido de que NO. No les vencimos, ni tampoco convencimos. En realidad, se albergaron dentro de nosotros, y ahí están: modificando nuestra g